Al igual que muchos otros países de la OCDE, Grecia ha emprendido una ambiciosa transformación digital de su sector público para hacerlo más eficaz, sostenible, proactivo y centrado en las personas. Sin embargo, los proyectos de transformación digital presentan desafíos en términos de gobernanza, adquisiciones, implementación y capacidades institucionales. Este análisis explora cómo Grecia podría superar estos desafíos para garantizar que las inversiones en gobierno digital aborden cuellos de botella críticos como el proceso de adquisiciones y generen coherencia de políticas, logren una buena relación calidad-precio y obtengan los resultados previstos. También destaca el papel crucial de la coordinación de todo el gobierno.